domingo, 18 de septiembre de 2016

MALENTENDIDO CON DANTE.

mi bosque negro
se espande por todo un valle de venas rajadas
estrellas suicidas y afónicas
escondidas, agachadas y putrefactas
se ahogan en neones poco imaginables
tremendas locuras del yo y del frío
la cintura del vacío que calienta mi mano amputada
el dolor te enseña a bailar sin música
la no-acción de los granjeros
era una carta escrita al temblor del oeste
lucha contra las hienas con los colmillos llenos de ampollas
líquido de piedra, sarnoso y mecánico
yo trabajo de asesino y de caperucita
gasolina en la hiedra
arrebato sifilítico y tiernas tetas cortadas alimentando a orugas
impunes los treinta representantes de la risa
la noche es el entrenamiento para la muerte
deslizarse por las costillas
estallan encías y mi mano se derrite en tus ojos
la nada es mi guía
las calaveras entraron en mí
primer aviso: yo siempre lluevo.

Piet Mondrian

No hay comentarios:

Publicar un comentario